Llueve sobre la ciudad

El día martes llovió en Antofagasta. Dicen en las noticias que llovió 11 milímetros y medio creo, algo así escuche, pero que solamente había llovido a esa magnitud hace más de 5 años. Lo que es yo, quede toda mojada. Cuando comenzó a lloviznar yo estaba tan contenta, hace mil años que no sentía esas gotitas en la cara, recordemos que yo soy de Arica, la ciudad mas seca del mundo, en la cual llueve con suerte para el invierno boliviano o mejor dicho las lluvias estivales. De repente sentí en mis oídos "Esta tarde vi. llover, vi gente correr y no estabas tu", la canción de Armando Manzanero, busque de donde provenía el sonido, pues, era de mi cabeza. Tanto tiempo espere cantar frente a una ventana lluviosa esa canción, con un café y un cigarro en mi mano, llorando a mares, pero siempre cantando, esta era mi gran oportunidad, pero no tenia por que llorar. Me sentí tan bien, pensé muchas veces en llorar por algo, ir a la playa y gritar lo mal que me sentía, pero no pude hacerlo, pues, no me sentía mal. Fue una sensación tan extraña pero tan reponedora a la vez. Pensé en ti, pero ya no me causaste dolor, me causaste alegría. Pensé en él, pero él todavía no me causa dolor solo ilusión, pensé en ellos, pero los quiero tanto que el extrañarlos no me causa llanto, me causa ganas de verlos y ganas de esforzarme y así no tener que quedarme con nada y hacer todo bien para que verlos lo más pronto posible.